jueves, 30 de octubre de 2014

HOMENAJE A DAVID LAGMANOVICH




En el año 2010, más exactamente el 26 de octubre, a través de un llamado telefónico, me enteré del fallecimiento de David Lagmanovich. Ese día sentí un dolor que no había sentido desde la muerte de mi padre...  Después de un rato y aun masticando tristeza y bronca, fui a mi biblioteca y saqué todos los libros que él me había regalado y los tuve en la mano como quien sostiene un amuleto. David, más que un maestro generoso y un guía benigno y paciente, fue un amigo leal como pocos. Fue uno de mis mejores apoyos durante los años que me honró con su amistad. Puedo decir, muchas cosas de él, puedo contar anécdotas interesantes, puedo referirme a su obra que conozco lo mejor que puedo pero, se me ocurre, que el mejor homenaje que se le puede hacer es leer algo de lo que él ha escrito.


DECÁLOGO DEL MICRORRELATO (David Lagmanovich)
  
1. No existe una descripción minuciosa de las circunstancias.

2. No existe la construcción de un personaje, ni individual ni colectivo. Introducir a los personajes violentamente sin morosas descripciones.

3. El truco del escritor de microrrelatos consiste en agregar todas las palabras necesarias y ninguna de las innecesarias.

4. La minificción está rodeada de silencio; no ofrece cabida a digresiones y circunloquios.

5. No impide la existencia de una voz narrativa, por lo general omnisciente.

6. Tres momentos o puntos de inflexión: el que presenta una situación determinada; el que indica la aparición de un elemento que perturba el orden establecido; y un momento final, ya sea que éste implique una decisión a favor de una de las entidades contrastantes, o bien una neutralización de los opuestos.

7. Su entrada o comienzo: se prefiere del tipo in media res o continuación de algo.

8. Dos posibles finales: un final “de confirmación”, un desenlace que mantenga el tono y la coherencia; un final “de ruptura”, que no mantenga el tono y la coherencia. Además de finales “cerrados” y “abiertos”.

9. La importancia del título como elemento de la construcción; el título orienta la lectura.

10. El tema de un microrrelato aparece como núcleo nebuloso de significación: una intuición que gira alrededor de una palabra, de una noción o de un personaje.

Conclusión: un título, que se supone significativo y orientador; un comienzo, generalmente in media res; un desarrollo, caracterizado por las nociones de concisión, simplicidad sintáctica y velocidad; y un final, que puede ser conclusivo o abierto.

 TEXTOS

 Marcos
En aquel cuarto de hotel había un antiguo arcón, dentro del cual se encontró el manuscrito de un libro de relatos. En el primer cuento se hablaba de una colección formada por un relato de cada integrante de un club de narradores. El primero de ellos se refería a un antiguo arcón que se podía encontrar en un cuarto de hotel.


La flor
La niña se inclinó sobre la flor, apenas visible sobre el rojo profundo de la tierra. La acarició con infinita ternura y la besó con levedad de brisa. Después volvió a montar en el camello y siguió su camino. Ahora sabía que el oasis estaba cerca.

Los ojos
Estoy harta de sus críticas. Lo que más irrita a mis compañeros de excursión es la mirada que me atribuyen: murmuran que observo todo en derredor, que no dejo de percibir ningún movimiento de ellos, que no se me puede sorprender, que mi nerviosismo es extremo y que todo me entra por los ojos, esos ojos que ellos sienten como una amenaza que les impide toda intimidad. No los culpo: yo también, a veces, querría tener otros ojos. Pero todas las moscas somos así. 


El decálogo y los textos fueron extraídos del sitio Web de Editorial Micrópolis: http://micropolis.pe/

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